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5. Questions About the Afterlife
5. Preguntas sobre la Vida Después de la Vida
Pregunta de introducción: ¿Cuáles son las mejores vacaciones que has tenido? ¿Qué fue lo que las hizo maravillosas? …. O, ¿a dónde quisieras ir de vacaciones y porqué?
Cuando pensamos en la eternidad y en cómo será la vida después de la muerte, muchas personas tienen interrogantes que me gustaría contestar. Aquí presento sólo algunas de las que me han sido hechas:
Nuestras mascotas, ¿estarán con nosotros?
¿Tienen las mascotas la bendición de la eternidad? Y, ¿estará mi mascota en el cielo cuando yo llegue allá?
Esta es una pregunta muy importante para algunas personas, especialmente cuando consideramos que los animales pueden ser una parte importante en nuestras familias. ¿Tienen los animales un alma que pueda sobrepasar los umbrales de la muerte? Yo creo que es claro que los animales tienen un alma. Esta clase de afirmación trae consigo la pregunta, ¿qué es lo que queremos decir con la palabra alma? Mucho maestros de la Biblia usan la palabra alma para describir a la mente, el deseo y las emociones, la parte invisible de nuestra naturaleza; el espíritu del hombre es lo que lo conecta con Dios (I Tesalonicenses 5:23). ¿Los animales piensan y tienen poder de razonamiento, verdad? Yo tengo un Greyhound italiano, una raza pequeña de greyhounds; en el invierno de Ohio, cuando ve la nieve, ella no sale a hacer sus necesidades afuera. La hemos entrenado para que las haga en una bandeja para gatos con papel periódico, la cual podemos botar cuando ella termina lo que sea que quiera hacer. Ocasionalmente, tiene algún accidente y tenemos que limpiar lo que hizo sobre el linóleum de la cocina en donde está su bandeja. Cuando le ordeno que se vaya, ella baja su cabeza con vergüenza. Ella sabe que ha hecho algo malo. Si ella no tuviera una mente, deseos o emociones, ¿Por qué siente vergüenza? Los animales sienten las cosas. Tienen emociones. Cuando me ve en casa, chilla fuertemente con alegría y no deja de saltar (como Tigger en los dibujos animados de Winnie the Pooh). No puedo creer que estos animales inteligentes no vivan después de la muerte de sus cuerpos. Miremos uno o dos versículos en las Escrituras:
En el Antiguo Testamento, la palabra hebrea para alma es nephesh. Es la palabra usada cuando Dios creó los animales:
24 Luego dijo Dios: Produzca la tierra seres vivientes (nephesh) según su género, bestias y serpientes y animales de la tierra según su especie. Y fue así. (Génesis 1:24)
La palabra nephesh también es usada en Génesis 1:30, donde se nos dice que las criaturas que se mueven sobre la tierra tienen aliento (nephesh) de vida. Es claro que la palabra nephesh es una palabra que se traduce como alma porque David al escribir el Salmo 16, dice: “Porque no dejarás mi alma en el Seol, ni permitirás que tu santo vea corrupción.” (Salmo 16:10). Existen obviamente grandes diferencias entre el alma de un animal y el alma de un ser humano; el animal no tiene un espíritu como lo tiene el hombre. ¿Sienten los animales culpa cuando han hecho algo malo? - ¡mi perro seguro que si! ¿Tienen conciencia? No lo sé, pero no lo creo. Yo creo que la conciencia es parte del espíritu humano, el hombre está compuesto de cuerpo, alma y espíritu (I Tesalonicenses 5:23). Parece claro de alguna manera, que ellos rendirán cuenta a Dios, en alguna forma, de lo que han hecho en vida. Hay un pasaje en Génesis capitulo 9 en donde Dios dice:
Porque ciertamente demandaré la sangre de vuestras vidas; de mano de todo animal la demandaré, y de mano del hombre; de mano del varón su hermano demandaré la vida del hombre. (Génesis 9:5)
¿Por qué Dios les pediría cuentas a los animales si sus vidas se van a extinguir después de la muerte? Si El va a pedir cuentas a cada animal, ¿no suena acaso como que ellos también van a sobrepasar la muerte y vivir eternamente? Si no fuera así, ¿por qué Dios les pediría cuentas? Sabemos que los animales tendrán un lugar en la nueva tierra:
El lobo y el cordero serán apacentados juntos, y el león comerá paja como el buey y el polvo será el alimento de la serpiente. No afligirán, ni harán mal en todo mi santo monte, dijo Jehová. (Isaías 65: 25)
De este pasaje extraemos que es obvio que el alma de los animales va a ser cambiada en alguna manera, porque no es natural que un cordero y un lobo coman hierba juntos y que no se dañen mutuamente. El orden entero de la creación va a ser transformado. Si esto es verdad al referirnos a la Nueva Tierra, entonces ¿por qué pensamos que el cielo será diferente? Yo sí creo que vamos a ver a nuestras mascotas en el cielo. Yo no puedo imaginarme un cielo sin nuestras queridas mascotas.
19 Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios. 20 Porque la creación fue sujetada a vanidad, no por su propia voluntad, sino por causa del que la sujetó en esperanza; 21 porque también la creación misma será libertada de la esclavitud de corrupción, a la libertad gloriosa de los hijos de Dios. 22 Porque sabemos que toda la creación gime a una, y a una está con dolores de parto hasta ahora. (Romanos 8: 19 – 22)
El deseo interno de todo el reino animal es el cambio de su naturaleza, lo cual yo creo, sucederá en el momento de la resurrección de los santos, cuando venga Jesús.
¿Qué sucede con la gente que comete suicidio?
Se nos ha dicho en los Diez Mandamientos que no debemos matar (Éxodo 20: 13). Nosotros no nos pertenecemos a nosotros mismos (I Corintios 6: 20), de manera que ¿quién nos da el derecho de arrebatarnos la vida? Cada uno de nosotros ha sido creado por una razón y no tenemos ningún derecho a terminar con nuestra vida y estamos en peligro de juicio si lo hacemos. Habiendo dicho esto, Dios sabe nuestros razonamientos y nuestras motivaciones, y el porqué una persona abruptamente le da fin a su propia vida. Él es totalmente justo en sus juicios, y sería erróneo de nuestra parte hacer un juicio sobre cuál será el destino eterno de una persona que comete suicidio. Yo no puedo contestar esto, sólo puedo decir que creo que Dios, quien conoce a cada persona íntimamente, va a juzgar a cada uno individualmente.
¿Es correcto hablar con aquellos que ya han muerto? ¿Pueden ellos hablarnos o aparecérsenos en sueños o visiones?
Yo creo que esto está muy mal y es terriblemente peligroso que un alma eterna interactué con espíritus etéreos.
10 No sea hallado en ti quien haga pasar a su hijo o a su hija por el fuego, ni quien practique adivinación, ni sortílego, ni hechicero, 11 ni encantador, ni adivino, ni mago, ni quien consulte a los muertos. 12 Porque es abominación para con Jehová cualquiera que hace estas cosas. Y por estas abominaciones Jehová tu Dios echa estas naciones de delante de ti. (Deuteronomio 18: 10 -12)
¿Qué es la adivinación?
Adivinación (del Latín divinare "prever, ser inspirado por un dios”, relativo a divinus, divino) es el intento de echar una mirada a una pregunta o situación en forma de un proceso estandarizado o ritualista. Los adivinos obtienen sus interpretaciones acerca de cómo un consultante debe proceder a través de la lectura de signos, eventos o presagios o a través de un alegado contacto con un agente sobrenatural
¿Qué es un médium o espiritista?
La versión King James usa las palabras espíritus familiar para describir a una persona en contacto con espíritus que son etéreos (biblegateway.com resalta 15 ocurrencias en las escrituras). Estos espíritus malos se disfrazan como queridos miembros de la familia que ya han partido, esa es la razón por la cual son llamados espíritus familiares (como en familia). En la cultura india americana uno debe consultar con sus ancestros para encontrar direcciones del mundo del más allá. Pero estos espíritus no son los de los familiares que han muerto y se han ido, sino espíritus malignos asignados por satanás a una familia, para asegurarse de que estos sean mantenidos atados a las invisibles y oscuras fuerzas malignas. En muchas culturas asiáticas, los “ancestros” demandan sacrificios para apaciguarlos, pero estos sacrificios se hacen a los demonios, no a los miembros de la familia que han partido:
Sacrificaron a los demonios, y no a Dios; A dioses que no habían conocido, A nuevos dioses venidos de cerca. (Deuteronomio 32: 17)
Después de que el rey Saúl dedicó el resto de su vida a perseguir a muerte al rey escogido por Dios, David, hubo un momento en que Dios no le dio ninguna dirección a través de su oración o a través de la palabra profética. Sintiéndose en un lugar desesperado, él dio el terrible paso de buscar respuestas a través de una médium que consultaría a un espíritu. Samuel, el profeta, había muerto un tiempo atrás y el rey Saúl fue a la médium y le pidió que le trajera de vuelta el espíritu de Samuel:
11 La mujer entonces dijo: ¿A quién te haré venir? Y él respondió: Hazme venir a Samuel. 12 Y viendo la mujer a Samuel, clamo en alta voz, y habló aquella mujer a Saúl, diciendo: 13 ¿Por qué me has engañado?: pues tú eres Saúl. Y el rey le dijo: No temas. ¿Qué has visto? Y la mujer respondió a Saúl: He visto dioses que suben de la tierra. 14 El le dijo: ¿Cuál es su forma? Ella respondió: Un hombre anciano viene, cubierto de un manto. Saúl entonces entendió que era Samuel, y humillando el rostro a tierra, hizo gran reverencia. 15 Y Samuel dijo a Saúl: ¿Por qué me has inquietado haciéndome venir? Y Saúl respondió: Estoy muy angustiado, pues los filisteos pelean contra mí, y Dios se ha apartado de mi, y no me responde más, ni por medio de profetas ni por sueños; por esto te he llamado, para que me declares lo que tengo que hacer. (I Samuel 28: 11 – 15. Los énfasis son míos)
¿Qué te llama la atención de este pasaje y por qué la mujer grita con temor?
Se pueden estar preguntando porqué me he referido a este pasaje. Yo encuentro el versículo 12 muy interesante; por esta razón, es claro que la mujer no estaba viendo lo que normalmente veía. Ella estaba obviamente conmocionada por el espíritu que estaba delante suyo y supo instantáneamente que la persona preguntándole era Saúl, quien había ya echado a todos los médiums de sus tierras (I Samuel 28:3). ¿Qué fue lo que ella vio que la conmocionó así? Yo creo que realmente fue Samuel y no quien ella estaba esperando, un demonio enmascarado como una persona que había partido. Samuel le dijo a Saúl que él iba a morir al día siguiente junto con sus hijos y que Dios le iba a dar la victoria a los filisteos.
Cuando las personas practican una sesión de espiritismo, ellos están hablando con demonios. Esos demonios son muy engañosos en sus disfraces a causa del conocimiento de detalles íntimos que han tenido lugar entre un ser que ha partido y el que se quedó en la tierra. Si has practicado el consultar a demonios en una sesión de espiritismo, ellos por lo general han realizado incursiones en la vida de la persona en diferentes formas. Mi consejo es que se una a algún miembro de un grupo de oración intercesora y pida que todas las ataduras y cadenas sean rotas mediante el arrepentimiento, la confesión y la renuncia a toda influencia demoniaca.
¿Es la cremación de los cuerpos de los muertos aceptable de acuerdo con la Palabra de Dios?
Nuestro Dios es un Dios de creación. Yo no veo ninguna dificultad para Dios, quien hizo el universo con sus creativas palabras habladas, en otorgar un cuerpo resucitado a alguno que fuera cremado. ¿Habrá algo que sea tan difícil para el Señor? (Jeremías 32: 27). Durante la Edad Media, cuando una plaga barrió con cerca de una tercera parte de la población de Europa, estoy seguro de que hubo muchos de los santos de Dios cuyos cuerpos fueron quemados para ponerle fin a la plaga. Sabemos que muchos santos fueron quemados en la hoguera también, por el testimonio de Jesús. No importa en qué estado se encuentre el cuerpo de una persona cuando Dios se mueva en su poder de resurrección. El polvo de nuestros cuerpos, aun si fueran cenizas, no solamente será restaurado sino transformado en un cuerpo celestial.
¿Recordaremos nuestra vida en la tierra cuando estemos en el cielo?
¡Absolutamente! Jesús nos lo dice acerca de la conversación entre Abraham y el hombre rico en Lucas 16:25, en donde Abraham dice: “Hijo, acuérdate que recibiste tus bienes en tu vida, y Lázaro también males;… Hay cosas que aprendemos en la Tierra que no pueden ser enseñadas en el cielo o en la nueva tierra No puedo creer que esas lecciones que hemos aprendido acerca de superar nuestra naturaleza pecaminosa, no sean recordadas y no sean parte de nuestro carácter en el cielo. Mi vida pasada de pecado, delinea mi carácter actual porque temo regresar allí cuando recuerdo como el pecado se las ingeniaba para atarse a mi vida. Es bueno para todos nosotros que reflexionemos en las personas que solíamos ser fuera de nuestra relación con Cristo y su poder salvador en nuestras vidas. Nuestras memorias ayudan a formar nuestro carácter. Dios invierte toda una vida en formar nuestro carácter. Aunque creo también que otra transformación también ocurre cuando vamos a estar con el Señor (Brillaremos como estrellas por siempre y siempre, Daniel 12:3) Y creo que nuestro carácter vive en nosotros como parte de “quienes somos” en la eternidad. Es lo que nos hace a todos, únicos. La formación de nuestro carácter se da a un gran precio y es precioso para Dios. El autor Randy Alcorn en su libro: Cielo, tiene estas palabras que decir acerca del recuerdo de nuestras vidas en este mundo:
“Un autor afirma: ‘No recordaremos nada de este viejo mundo llamado Tierra… ¡ni siquiera lo recordaremos! Sencillamente no vendrá nuestra mente.’ Esta mala concepción común confunde a la gente. Piensan que no recordaremos nuestras vidas terrenales, incluidas las relaciones tan preciosas para nosotros. Esta visión de que no recordaremos nuestras vidas presentes generalmente viene de la interpretación de estas escrituras: Isaías 65: 17; ‘Porque he aquí que yo crearé nuevos cielos y nueva tierra; y de lo primero no habrá memoria, ni mas vendrá al pensamiento.’ Esto no sugiere literalmente una carencia de memoria, como si el Dios omnisciente no pudiera recordar el pasado. En lugar de ello, es como lo que Dios le comenta a Jeremías: “… y no me acordare más de su pecado.” (Jeremías 32:34) Significa que Dios elige no recordar nuestros pecados pasados o guardarlos para usarlos en contra nuestra.
El Milenio
En nuestra última sesión hablamos acerca de la resurrección de los santos cuando Cristo regrese. Leímos que aquellos que han nacido de nuevo y caminan con Cristo, recibirán un cuerpo imperecedero, un cuerpo de poder que es inmortal. Este cuerpo será como el cuerpo resucitado de Cristo, un cuerpo que fue sembrado en deshonra, pero resucitado en gloria (I Corintios 15: 43). Se nos ha dicho que los santos reinaran con Cristo por mil años (Apocalipsis 20:4-6) y que Satanás será atado y arrojado al abismo (Apocalipsis 20:3)
1 Vi a un ángel que descendió del cielo, con la llave del abismo, y una gran cadena en la mano. 2 Y prendió al dragón, la serpiente antigua, que es el diablo y Satanás y lo ato por mil años; 3 y lo arrojo al abismo, y lo encerró, y puso su sello sobre él, para que no engañase más a las naciones, hasta que fuese cumplidos mil años; y después de esto debe ser desatado por un poco de tiempo. 4 Y vi tronos, y se sentaron sobre ellos los que recibieron facultad de juzgar, y vi las almas de los decapitados por causa del testimonio de Jesús y por la palabra de Dios, los que no habían adorado a la bestia ni a su imagen, y que no recibieron la marca ni en sus frentes ni en sus manos; y vivieron y reinaron con Cristo mil años. 5 Pero los otros muertos no volvieron a vivir hasta que se cumplieron mil años. Esta es la primera resurrección. 6 Bienaventurado y santo el que parte en la primera resurrección; la segunda muerte no tiene potestad sobre estos, sino que serán sacerdotes de Dios y de Cristo, y reinaran con el mil años. (Apocalipsis 20: 1-6)
Recuerdan que leímos un poco antes, en este mismo estudio – que la creación entera ha estado esperando el momento en que ocurra la resurrección y aquellos de nosotros que estamos en Cristo nos vestiremos con nuestros cuerpos incorruptibles. Recuerdan el pasaje: Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios. (Romanos 8: 19) Bueno, finalmente vemos en el milenio, lo que el reino animal, la creación, han estado esperando:
1 Saldrá una vara del trono de Isaí, y un vástago retoñará de sus raíces. 2 Y reposará sobre él el Espíritu de Jehová; espíritu de sabiduría y de inteligencia, espíritu de consejo y de poder, espíritu de conocimiento y de temor de Jehová. 3 Y le hará entender diligente en el temor de Jehová. No juzgará según la vista de sus ojos, ni argüirá por lo que oigan sus oídos; 4 sino que juzgará con justicia a los pobres y argüirá con equidad por los mansos de la tierra; y herirá la tierra con la vara de su boca, y con el espíritu de sus labios matará al impío. 5 Y será la justicia cinto de sus lomos, y la fidelidad ceñidos de su cintura. 6 Morará el lobo con el cordero, y el leopardo con el cabrito se acostará; el becerro y el león y la bestia doméstica andarán juntos, y un niño los pastoreará. 7 La vaca y la osa pacerán, sus crías se echarán juntas; y el león como el buey comerá paja. 8 Y el niño de pecho jugará sobre la cueva del áspid, y el recién destetado extenderá su mano sobre la caverna de la víbora. 9 No harán mal ni dañarán en todo mi santo monte; porque la tierra será llena del conocimiento de Jehová, como las aguas cubren el mar. 10 Acontecerá en aquel tiempo que la raíz de Isaí, la cual estará puesta por pendón a los pueblos, será buscada por las gentes; y su habitación será gloriosa. (Isaias 11: 1- 10)
¿Cómo imaginas que será la vida en la tierra durante el milenio?
También, ¿Cómo el hecho de que satanás este atado en cadenas ha de afectarnos?
No habrá más guerras durante mil años. Hasta ese momento él permanecerá en el abismo (La palabra griega es Abusso, una palabra que significa sin-fin, insondable, inconmensurable profundidad, enorme, sin límites). No habrá más tentación de hacer lo malo o pecar. Nuestros cuerpos resucitados no tendrán temor de ser dañados. Nuestra naturaleza pecaminosa será quitada y no tendremos ningún deseo de pecar. No tendremos temor a la muerte.
¿Qué te gustaría hacer en esos mil años que no hayas podido hacer en esta vida?
2 Acontecerá en lo postrero de los tiempos, que será confirmado el monte de la casa de Jehová como cabeza de los montes y será exaltado sobre los collados, y correrán a él todas las naciones. 3 Y vendrán muchos pueblos, y dirán: Venid, y subamos al monte de Jehová, a la casa del Dios de Jacob; y nos enseñara sus caminos, y caminaremos por sus sendas. Porque de Sion saldrá la ley, y de Jerusalén la palabra de Jehová. 4 Y juzgará entre las naciones, y reprenderá a muchos pueblos; y volverán sus espadas en rejas de ardo, y sus lanzas en hoces; no alzará espada nación contra nación, ni se adiestrarán más para la guerra. (Isaias 2: 2-4)
Imaginen vivir en el planeta Tierra donde el Señor Jesucristo reine en su trono, en Jerusalén. No habrá necesidad económica para tanques, armas o aviones. Cristo Jesús establecerá su propio gobierno en la Tierra poblada por santos. Todas las naciones estarán en paz unas con otras con el Rey Jesús sentado en su trono. Todos los que estén reinando sobre naciones, territorios, estados, ciudades y pueblos, serán cristianos, que merecerán ese lugar por haber sido fieles resistiendo el mal y cuidando al pueblo de Dios. Yo creo que será un tiempo de gran prosperidad económica para todos aquellos que habiten el planeta Tierra. Se nos dice más adelante que la misma Jerusalén será levantada más alto que las montanas que la rodean. En este momento, uno puede ver a Jerusalén hacia abajo, desde el Monte de los Olivos, en el lado Este. Es posible que Jerusalén sea levantada mediante algún suceso geológico.
El rey, el Señor Jesucristo, nos enseñará sobre sus caminos y resolverá cualquier persistente disputa entre las naciones. Somos enseñados que la nueva Jerusalén no vendrá del cielo a la Tierra hasta que los mil años hayan transcurrido (Apocalipsis 21: 1-2). Hasta ese momento el trono del Rey Jesús estará en Jerusalén, a donde mucha gente acudir a alabar y adorar al Rey Jesús (Isaías 2: 2-3). El profeta Isaías dice: Tus ojos verán al Rey en su hermosura; verán la tierra que está lejos (Isaías 33:17). ¿Se imaginan estar sentado a los pies de Jesús mientras él nos enseña sus caminos? … y nos enseñará sus caminos,… (Isaías 2:3)
¿Quiénes van a gobernar con Cristo durante el milenio?
¿Qué determinará el rango de liderazgo y poder de aquellos que rijan y reinen con Cristo?
Ciertamente el carácter va a tener mucho que ver con esto, pero Jesús también nos dio una parábola para ilustrar quien será considerado digno de gran responsabilidad en el liderazgo en el milenio, en la nueva Tierra:
Parábola de las diez minas
11 Oyendo ellos estas cosas, prosiguió Jesús y dijo una parábola, por cuanto estaba cerca de Jerusalén, y ellos pensaban que el reino de Dios se manifestaría inmediatamente. 12 Dijo, pues: Un hombre noble se fue a un país lejano, para recibir un reino y volver. 13 Y llamando a diez siervos suyos, les dio diez minas, y les dijo: Negociad entre tanto que vengo. 14 Pero sus conciudadanos le aborrecían, y enviaron tras él una embajada, diciendo: No queremos que este reine sobre nosotros. 15 Aconteció que vuelto él, después de recibir el reino, mandó llamar ante él a aquellos siervos a los cuales había dado el dinero, para saber lo que había negociado cada uno. 16 Vino el primero, diciendo: Señor, tu mina ha ganado diez minas. 17 El le dijo: Está bien, buen siervo; por cuanto en lo poco has sido fiel, tendrás autoridad sobre diez ciudades. 18 Vino otro, diciendo: Señor, tu mina ha producido cinco minas. 19 Y también a este dijo: Tú también sé sobre cinco ciudades. 20 Vino otro, diciendo: Señor, aquí está tu mina, la cual he tenido guardada en un pañuelo; 21 porque tuve miedo de ti, por cuanto eres hombre severo, que tomas lo que no pusiste, y siegas lo que no sembraste. 22 Entonces él le dijo: Mal siervo, por tu propia boca te juzgo. Sabias que yo era hombre severo, que tomo lo que no puse, y que siego lo que no sembré; 23 ¿por qué, pues, no pusiste mi dinero en el banco, para que al volver yo, lo hubiera recibido con los intereses? 24 Y dijo a los que estaban presentes: Quitadle la mina, y dadla al que tiene las diez minas. 25 Ellos le dijeron: señor, tiene diez minas. 26 Pues yo os digo que a todo el que tiene, se le dará; mas al que no tiene, aun lo que tiene se le quitará. 27 Y también a aquellos mis enemigos que no querían que yo reinase sobre ellos, traedlos acá, y decapitadlos delante de mí. (Lucas 19: 11-27)
El propósito de la parábola es informarnos acerca de que pasara durante el tiempo mientras esperamos el regreso del Rey Jesús a su trono. ¿Qué estarán haciendo sus siervos mientras El no está? Antes de irse, un hombre noble le dio a diez de sus siervos una mina a cada uno. Una mina era la unidad monetaria de un valor aproximado de tres meses de salario, de esos tiempos.
¿Qué crees que representan las minas y los sirvientes?
La Parábola de las diez minas es similar a la Parábola de los talentos. Hay una diferencia importante; en la Parábola de las diez minas, la misma cantidad es dividida en partes iguales, una mina para cada uno de los siervos. En la Parábola de los talentos (Mateo 25: 14- 30), a uno se le da cinco talentos, a otro dos, y a otro uno. Un talento era una unidad monetaria. Era una unidad muy valiosa, usualmente una medida de oro o plata. Podemos ver esos talentos como nuestros propios regalos, habilidades, conocimientos y finanzas, en resumen, nuestros recursos totales. A algunos se les ha dado más talentos y habilidades que a otros y se nos pedirá cuentas por lo que recibimos de Él. La parábola de las diez minas es diferente. A cada persona sólo se le entrega una mina. Esta única mina podría representar lo que se nos es otorgado a todos nosotros en igual medida, la administración del mensaje del evangelio.
Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y también al griego. (Romanos 1:16)
El evangelio es la cosa más poderosa del planeta Tierra. El mensaje del amor, la misericordia y la gracia de Dios hacia la humanidad es una verdad sagrada que descansa en todos nosotros los que creemos en hacer lo que sea necesario para extender este mensaje.
Sino que según fuimos aprobados por Dios para que se nos confiase el evangelio, así hablamos; no como para agradar a los hombres, sino Dios, que prueba nuestros corazones. (I Tesalonicenses 2: 4, los énfasis son míos)
La palabra aprobado en el verso anterior viene de la palabra griega dokimazo, que quiere decir poner a prueba algo para que demuestre si es digno. Dios permite que atravesemos feroces pruebas para que podamos ser contados por dignos de llevar lo que El nos ha confiado, la sagrada verdad del evangelio que podemos llevar a otros. Las pruebas de Dios están diseñadas para refinarnos de manera que podamos ser portadores de la verdad.
Si el evangelio está representado como la mina que le es otorgada a cada uno de sus diez siervos, ¿qué quiere decir la frase “Negociad entre tanto que vengo”?
Cada cristiano tiene la responsabilidad de expandir el evangelio en todas las formas que pueda. No podemos guardarlo para nosotros. La palabra griega que es traducida en la frase “Negociad” es pragmateuomai. Esto significa hacer negocios de manera pragmática. Está hablando de invertir o negociar de manera eficiente, sensible, con la expectativa de obtener ganancias en retorno de la inversión. No puedo imaginar a alguien que encuentre la cura contra el cáncer y la guarde para sí mismo. Sería un crimen en contra de la humanidad. De la misma manera, se nos ha sido otorgada una cura para el cáncer del alma. Cuando creemos en el evangelio y recibimos la gracia de Cristo en nuestras vidas, Dios quiere que compartamos con otros lo que hemos recibido. Nosotros tenemos que hacer lo que se posible para promover el evangelio, viendo de invertir nuestros recursos en forma practica en un negocio de esta naturaleza, invirtiendo sabiamente en el reino de Dios.
¿Puedes pensar en maneras práctica en las que puedes invertir tu tiempo, energías y talentos para construir el Reino de Dios? Pensando en términos de inversión y retorno, ¿cuáles son algunas formas sabias de invertir?
En el verso 24, la mina que fue guardada en un pañuelo le fue dada al que había ganado otras diez, así que ahora tenía 11. El amo no necesitada el dinero. Es obvio, por el texto, que las ganancias de la inversión del amo fueron guardadas por cado uno de los dos hombre juntamente con sus premios. El que no hizo nada no tuvo premio ni dinero para invertir tampoco. No hubo ninguna otra penalidad o castigo por esta falta de inversión, como se muestra en este pasaje. Yo sólo pienso que él quedó lamentándose de no haber hecho nada. Este hombre que no hizo nada nos da un ejemplo del tipo de creyentes que va a llegar al cielo, pero tiene muy poquitos tesoros en el cielo para su “llegada a casa” (I Corintios 3: 12- 15)
19 No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín corrompen, 20 sino haceos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el orín corrompen, y donde ladrones no minan ni hurtan. 21 Porque donde este vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón. (Mateo 6: 19- 21)
Si el hombre noble no quería realmente el retorno de sus inversiones, ¿Cuál fue el propósito de darles esa semilla de dinero, pidiéndoles que la invirtieran e hicieran negocio con ella?
El hombre noble no estaba interesado en el dinero; él lo llama “poco” en el versículo 17. Para un rey, ¿qué pueden significar tres meses de sueldo de un trabajador común? Era simplemente una prueba para ver el nivel de su fidelidad en el uso de lo que les había sido dado, su oportunidad de inversión. El quería ver quien de entre todos sus sirvientes valoraba el hecho de acrecentar el reino de su señor y sus riquezas. El necesitaba encontrar personas que fueran fieles en lo poco a quienes les podría dar mayores responsabilidades cuando el regrese.
El amo se mostró encantado y lleno de halagos para quien le trajo un 1000% de ganancias de su inversión. Le dijo “Bien hecho, mi buen siervo” (v.17)
¿Qué piensas acerca de los premios que fueron otorgados? ¡Hay una vasta diferencia entre tres meses de salario y ciudades enteras!
¿Cuáles serían los ingresos conjuntos de diez ciudades en América? Parece haber una gran diferencia entre esto y el valor de diez minas. El uso de una ciudad, probablemente, es una manera de mostrar la desproporcionada cantidad de premios por la energía, el tiempo y el dinero invertidos por las dos primeras personas. Yo creo que Dios nos está mostrando que:
“cosas que ojo no vio, ni oído oyó, ni han subido en corazón de hombre, son las que Dios ha preparado para los que le aman” (I Corintios 2:9; los énfasis son míos)
Tu puedes decir: “¡de seguro suena como mucho trabajo el estar encargado de diez ciudades! Yo quisiera vivir mis días descansando en las Bermudas o Hawái. ¡Encargarse de diez ciudades, puedes decir, no es un premio que me gustaría ganar!” Yo veo esta responsabilidad de encargarse de diez ciudades como un premio a la confianza. Habla de cercanía y de relación con el amo. ¿Qué hace que el jefe de cualquier compañía importante pase tiempo contigo? En cualquier organización saludable, serian sus más altos ejecutivos. De la misma manera, nosotros estaremos trabajando y relacionándonos en una proximidad muy cercana con nuestro amo, el Señor Jesucristo. ¡Qué gozo será eso! La idea de una ciudad, implica para mí, que habrá responsabilidad y autoridad, de manera que tendremos una participación en su gobierno en el Reino de los cielos. La idea de la ciudad, sencillamente nos ayuda en términos de nuestro entendimiento. El pasaje dice que nuestra mente no puede concebir lo que Dios tiene planeado para los que le aman. Al parecer, los que han obtenido ganancia de su inversión, lo hicieron con todo su corazón. Veremos en retrospectiva, aquellas cosas que son realmente importantes en la economía de Dios. ¡Aprendamos esa lección ahora, que aun tenemos tiempo para aplicarla! ¿Qué es lo importante en la economía de Dios? Busca en la vida de Jesús la respuesta. El invirtió su vida en las personas. Nosotros también necesitamos invertir nuestro tiempo en la gente, especialmente en aquellos que están sin Cristo en este mundo.
Oración: Por favor Dios, abre nuestros ojos para ver los tesoros en los cielos y danos la visión para entender que diferencia podemos hacer en nuestras vidas y en las vidas de otros. Muéstranos maneras de invertir nuestro tiempo y recursos, de forma tal que haya una ganancia grande en las vidas cambiadas por el poder del Evangelio. Amen
Esta clase fue escrita originalmente por el Pastor Keith Thomas, traducida por Elena Amoretti-Ranilla y revisada por Rossi Tretbar.
Para ver más estudios del Pastor Keith vaya a www.groupbiblestudy.com